Notcoin — futura distribución de TON/Telegram

Comentario semanal de Magaly Acosta. Colombia, Mexico, Bolivia.

17 de Agosto de 2002
Este Informe 1 América Latina, pretende ser más que un resumen semanal con las noticias más importantes ocurridas en nuestro continente, un comentario o reflexión a esos sucesos. Porque todo se sucede demasiado rápido. En esta ocasión tomaré a Colombia, Bolivia y México.



¿Existe un hilo común? ¿O aparecen como desconectados los acontecimientos de nuestro continente? Diremos que más bien podemos hablar de recurrencia: Los DDHH, la lucha contra el terrorismo y el refuerzo de la seguridad interior del estado por parte de los gobiernos de Colombia y México; los resultados de las nefastas políticas en materia económica que se han aplicado visibles en Argentina y ahora Uruguay donde los saqueos a supermercados sacudieron a una sociedad que creía que "esto aquí no puede pasar", como débil defensa ante la evidente bancarrota; Caso aparte, o más bien un destello esperanzador lo constituye la organización de la sociedad civil en Bolivia, lo cual quedó de manifiesto con el repunte de candidatos a la presidencia que representan a sectores campesinos de la sociedad. Venezuela se debate por una parte entre la declarada guerra impuesta por los medios de comunicación; una guerra mediática que no ha cesado ni siquiera ante el fracaso del golpe de estado que auspiciaron, mientras que por otro lado, el gobierno se muestra cada día más debilitado como en el caso de los militares que participaron en la sedición del pasado mes de abril, y que hoy son dejados en libertad. Chile, como siempre, será un caso aparte en el contexto latinoamericano, (algo de lo cual, dicho sea de paso, parece sentirse orgulloso) porque cuando todo se agita en el continente, el país del sur pareciera sumido en el más plácido letargo, sólo removido por el paro de transportistas, que por sus prácticas más bien recuerda a las actividades de los camioneros organizadas contra Allende en 1972. Santiago quedó paralizado por cientos de buses apostados en lugares estratégicos y que impidieron la circulación de vehículos. Se pretende (cautelosamente eso sí) aplicar a los empresarios del transporte (un poderosísimo gremio) la ley de seguridad interior del Estado, esa misma ley que sin que tiemble el pulso cae sobre los comuneros mapuche en el sur de Chile cuando éstos reclaman por sus derechos y reivindicaciones de tierras. Pero en esta ocasión me centraré tan sólo en tres países: Colombia, México y Bolivia.





 “La nueva presidencia (Uribe Vélez) comienza su andadura en unos momentos en que la crisis de los derechos humanos en Colombia se está agudizando y millones de personas en todo el país sufren a diario las consecuencias de la violencia política y las violaciones de derechos humanos perpetradas por las dos partes implicadas en el conflicto", ha declarado Amnistía Internacional. El gobierno del recién inaugurado partido de derecha, se encuentra en la disyuntiva de optar por detener la crisis de los DDHH o por el contrario, con el lema de “mano dura”, aplicar políticas que más bien empeorarán la situación, cuestión que parece más cercana a los planes de gobierno. Esto va desde otorgar a las fuerzas armadas atribuciones propias de la policía judicial y permitir al ejército que practique registros domiciliarios y detenciones sin autorización judicial, hasta restablecer la facultad presidencial de decretar el estado de sitio, que facilitará, en la práctica, la comisión de violaciones de derechos humanos al suprimir la supervisión judicial y legislativa y hacer caso omiso de las salvaguardias internacionales sobre los estados de excepción.



 En otro tono, pero evidenciando la misma doctrina, el presidente Fox, de México, convocó la semana pasada a “consolidar la seguridad nacional y gobernabilidad democrática”, destacando la importancia que tiene ésta de acuerdo con los cambios democráticos que vive el país, al tiempo que señaló al alto mando del Ejército que dicha seguridad y la gobernabilidad "son una tarea muy delicada" y exigen "mucha inteligencia, pensamiento táctico y estratégico, en donde el campo de acción está acotado por la ley". Esto, al encabezar la ceremonia de graduación de la 21 Antigüedad del Colegio de Defensa Nacional. No faltaron en su discurso palabras como “respeto a los derechos humanos”, “ética de servicio” y “lealtad a México”, no sin olvidar que en la agenda de gobierno se encuentra la lucha contra el crimen organizado, el terrorismo y el narcotráfico.



 En Bolivia irrumpe lo que algunos denominan ya como “Nueva Izquierda”, eso, tras el 20,9 % alcanzado por el dirigente campesino Evo Morales. Este ascenso estaría indicando la organización de la sociedad civil, ya no los tradicionales partidos políticos, frente al fracaso de las políticas neoliberales que azotan nuestro continente desde la década los 80. Bien lo resume el dirigente indígena cuando señala “hemos heredado las experiencias de los zapatistas en cuanto a su capacidad de encontrar en los campesinos la fuerza para interpelar las agresiones del mundo globalizado; hemos tomado de los cacerolazos argentinos la fuerza moral para salir a las calles y decirles a los amos del mundo que nos están matando de hambre y hemos heredado de la vieja izquierda ese espíritu rebelde que nos dice que los pobres del mundo unidos podemos encontrar una salida digna.”
Compartir
URL Copiado!