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Chile: el organizador en el fondo de la mina

Alejandro Tesa, Surysur.net
12 de Octubre de 2010
Twitter sirvió para algo más que mensajes livianos. discusiones a menudo baladíes y servicio de comunicación entre amantes. Adictos a la red social develaron que Luis Urzúa —uno de los 33 mineros que esperan ser rescatados en las próximas horas y probablemente la personalidad más fuerte entre ellos— es hijo de un dirigente comunista asesinado en 1973 por la dictadura. En un emocionante revés de la trama supo mantener en alto el ánimo de sus compañeros.

Para el periodista Camilo Taufic resulta un "crimen periodístico" que los grandes medios comerciales y del Estado hayan prácticamente ignorado a Urzúa. La pregunta es: ¿lo hacen por razones ideológicas?

Aunque no se ha rastreado que Urzúa sea él también integrante del PC, eso no se descarta por un grupo de periodistas y otras personas que, a lo largo del país, procuran bucear detrás de la información que se emite desde el Campamento Esperanza, centrada en una suerte de anecdotario que convierte la cuasi tragedia en vulgar "reality show".

El común de los medios periodísticos al mencionar a Urzúa sólo señalan que "perdió a su padre" cuando niño. Alguno —Radio Cooperativa, por ejemplo— se pregunta si el prolongado encierro de los trabajadores se consignará en el Libro de los Récords Guiness. La Nación cita a una hermana de Urzúa que piensa que éste querrá comer una cazuela o pescado al salir.

Los medios periodísticos nacionales banalizan el drama que viven centenares de personas desde que se produjo el derrumbe en la San José: el de los propios mineros atrapados, el de sus familias, parejas, hijos, vecinos y amistades —así como el esfuerzo contra reloj que realizan los equipos de perforación, médicos y de rescate.

Al parecer fue un periodista de la ciudad de Concepción, al sur de Santiago, quién descubrió la pista del padre de Urzúa.

Ha trascendido que para los expertos —por ejemplo aquellos que contribuyen desde la NASA en las diferentes tareas del rescate que pronto culminará ojalá con éxito— Luis Urzúa merece todo el respeto por haber conseguido trabajar sin desmayo para mantener la cohesión y la disciplina del grupo luego de quedar aislados y, después, a lo largo de las difíciles circunstancias que viven.

Topógrafo de profesión, Luis Urzúa, de poco más de cincuenta años, era el jefe de turno y se constituyó en líder de sus 33 compañeros atrapados desde el pasado cinco de agosto; será también —de no cambiarse el orden previsto— el último en salir de la mina y volver a la luz del día.
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