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La "bola de fuego" cayó en Argentina

2 de Octubre de 2004
El extraño objeto caído del cielo días pasados, detrás de la cadena de montes Martial, y que fue avistada por una decena de vecinos de la ciudad, causó daños en un área boscosa de ciento cincuenta metros cuadrados ubicada dentro del Parque Nacional, pero al impactar contra la corteza terrestre no dejó rastros visibles en el suelo, lo que aumenta el misterio en torno al episodio espacial que encendió un signo de interrogación en la población fueguina.
La "bola de fuego", así denominada por la prensa para contrarrestar la falta de precisiones científicas sobre la naturaleza del fenómeno, destrozó una cantidad considerable de árboles en su caída contra la superficie terrestre, y convirtió al sitio del impacto en un paisaje similar a un área de desmonte o de volteo forestal, con ejemplares partidos a una altura de unos ocho metros.
Por el momento, los científicos descartan que se trate de un meteorito porque en ese caso se trataría de una roca que suele dejar rastros inocultables de su impacto contra la tierra. Tampoco se descarta que la Tierra haya atravesado la estela de algún cometa y que las "bolas de fuego" sean parte de las evidencias.
Una expedición de cinco horas a pie realizada hacia el lugar por Fernando García y Roberto Ceballos, autores de las fotografías que publica Botella al mar comprobaron la existencia de "treinta a cuarenta árboles arrancados de raíz, algunos quebrados por la mitad y otros estallados, todos acostados en el suelo en sentido sur a norte".
Al parecer, García y Ceballos arribaron al mismo lugar descubierto por una patrulla policial, pero con diferencia de pocos metros lo que significa que hay al menos dos lugares de impacto y esto incrementa la cantidad de indicios del hecho que se busca clarificar.
Cabe recordar que los vecinos de Ushuaia observaron dos días consecutivos cómo dos objetos extraños caían contra la tierra y realizaron numerosos llamados a la Dirección Municipal de Defensa Civil y a la Policía para informar el hecho, descripto entonces como "una bola de fuego de varios colores que cayó detrás del Glaciar Martial".
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