Ofensiva georgiana en Osetia del Sur
8 de Agosto de 2008
"Un poco más de mil 400 personas murieron. Esta información será verificada, pero es una cifra aproximativa, basada en la información de los familiares", declaró Kokoiti antes de acusar al presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, de ser "el principal asesino".
"En Tsjinvali hay centenares de civiles muertos. Éste es el tercer genocidio del pueblo oseta cometido por Georgia", precisó Kokoiti a la agencia rusa Interfax en conversación telefónica.
El líder independentista añadió que cuatro carros de combate georgianos resultaron destruidos en una de las plazas de la ciudad.
Tsjinvali resultó "prácticamente destruida por los numerosos bombardeos con armas pesadas", aseguró con anterioridad el comandante de las fuerzas rusas de mantenimiento de la paz, el general Marat Kupajmetov.
Mientras que el ministerio ruso de Defensa informó que más de 10 soldados rusos de las fuerzas de mantenimiento de la paz murieron en los ataques.
"Posiciones de los soldados rusos de mantenimiento de la paz recibieron disparos de las fuerzas georgianas. Como resultado de ello, más de 10 soldados murieron y 30 resultaron heridos", indicó Igor Konashenkov, portavoz del alto mando militar ruso.
Los ataques empezaron horas antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Beijing, por cuya celebración el gobierno georgiano había decretado un armisticio, acordado con las fuerzas independentistas locales, que obligaba a suspender las operaciones bélicas hasta el fin de las competiciones.
En los últimos días, Osetia del Sur había denunciado los preparativos de una agresión georgiana a gran escala.
Osetia del Sur, que proclamó su independencia en 1992 tras el derrumbe de la Unión Soviética, quiere adherirse a la Federación de Rusia, de la que ya forma parte Osetia del Norte.
Cruz Roja pide evacuar heridos
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) pidió este viernes abrir un "corredor humanitario" para evacuar a los heridos de los ataques que sufrió Osetia del Sur.
"Estamos muy preocupados por el impacto humanitario; las ambulancias no pueden desplazarse, nos dicen que los hospitales están desbordados y que se practican operaciones quirúrgicas en los pasillos", dijo a los medios un portavoz del CICR.
La población está en refugios, sin electricidad ni medios de comunicarse con el exterior, agregó. El CICR emplazó a las partes en conflicto a no atacar a civiles, en acatamiento de las leyes internacionales.
Osetia del Sur, que proclamó su independencia en 1992 tras el derrumbe de la Unión Soviética, quiere adherirse a la Federación de Rusia, de la que ya forma parte Osetia del Norte.
EEUU respalda a Georgia
Por otro lado la escalda de violencia generó reacciones de las potencias occidentales. EEUU instó este jueves al Gobierno de Georgia y a las autoridades de “la región separatista” de Osetia del Sur a que pongan "de inmediato" fin a la violencia y retomen el diálogo para buscar de manera pacífica soluciones al conflicto que les enfrenta.
"Pedimos a Tiflis que mantenga una actitud comedida. Estamos muy preocupados por la situación y hacemos un llamamiento al fin inmediato de la violencia y al diálogo directo entre las partes", dijo el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Gonzalo Gallegos, en su rueda de prensa diaria.
Según agencias de noticias, el Departamento de Estado está en contacto con altos funcionarios rusos y georgianos para estar al tanto de la evolución de los acontecimientos. En este contexto, el Gobierno del presidente George W. Bush ha pedido a Moscú que "presione a los líderes de facto de Osetia del Sur para que cesen el fuego".
EEUU ha reiterado en varias ocasiones su firme respaldo a la soberanía y la integridad territorial de Georgia, un aliado en el Cáucaso, y ha criticado a Rusia por el apoyo abierto que proporciona a “las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur”.
Georgianos y surosetas se culpan mutuamente de iniciar las acciones, que amenazan con reactivar el conflicto iniciado a principios de la década de 1990 el cual ha causado cerca de dos mil muertos.